La Responsabilidad Penal de la Persona Jurídica, Compliance Penal, suscita el interés tanto de grandes como de pequeñas y medianas empresas. Todas deberían ir adoptando medidas de Organización y Gestión e implementar programas de Prevención de Delitos.

La reforma del Código Penal, en vigor desde julio de 2015, introduce una importante novedad, las personas jurídicas serán penalmente responsables de los delitos cometidos por sus representantes legales, administradores de hecho o de derecho y todos aquellos que tengan capacidad de decisión en el seno de la empresa, así como, los cometidos por sus empleados.

Del mismo modo, ciertos delitos que cometan los empleados en el seno de la organización pueden transferir la responsabilidad penal a los administradores de las personas jurídicas por omisión en el cumplimiento de sus obligaciones de supervisión, vigilancia y control.

En Lex Castellana contamos  con Ana María Holgado Montero, miembro del Área de Derecho Penal y Responsable del Departamento de Compliance Penal en Lex Castellana. Con ella profundizamos en este asunto.

1. Beneficios de Implementar un Programa de Compliance Penal para las Empresas.

 

Como nos cuenta Ana, son muchos los beneficios que reporta para las Empresas. Una mayor confianza en el mercado e incentivar la Contratación Internacional entre otros. Además de proporcionar un valor añadido.

2. ¿Cómo trabaja un despacho de abogados en el Área de Compliance Penal?

 

Distintas soluciones, sin importar el tamaño de la Empresa. Porque también las pequeñas deben contar con programas de Prevención de Delitos.

3. ¿Crees que llega suficiente información sobre Compliance Penal?, ¿están las empresas y organismos bien informados?

 

Es una cuestión de crear el hábito y así aplicar esa Cultura de Cumplimiento que, en un momento determinado, podría evitar una condena para la Organización.

Desde Lex Castellana deseamos que estas tres preguntas que hemos lanzado a nuestra Experta sean de utilidad para entender la importancia de la Responsabilidad Penal de la Persona Jurídica. ¡Gracias Ana!